martes, 13 de diciembre de 2011

TRASTORNOS DEL LENGUAJE EN EL ENTORNO ESCOLAR

Reproduzco un artículo muy interesante de Marc Monfort (logopeda). Trabaja en el centro Entender y Hablar y en el colegio Tres Olivos de Madrid. Este escrito se presentó en La Coruña, en el XX Congreso Nacional de Fepal (julio de 2010).

"Los investigadores indican que entre un 10 y un 15% de la población escolar entre 3 y 6 años presentan alguna dificultad en la adquisición del lenguaje y que entre un 3 y un 5% mantienen dificultades significativas en la escuela primaria.

A estos niños debemos añadir aquellos que asisten a la escuela ordinaria dentro de un programa de integración: la mayor parte de ellos, por distintas razones, presentan también dificultades notables y duraderas en la adquisición y manejo del  lenguaje oral y escrito.

Las consecuencias de estas dificultades van a variar en función de su gravedad y afectarán distintos aspectos de la vida del alumno dentro del aula.

- dificultades para seguir la dinámica de la clase: limitaciones en la comprensión verbal, déficit atencional secundario, dificultad en funciones ejecutivas

- dificultades ligadas a las limitaciones expresivas: para participar, para mostrar lo que sabe o conoce, para interactuar con los iguales

- dificultades de aprendizaje ligadas al déficit lingüístico

- consecuencias sobre el desarrollo general: integración social, imagen social, autoestima, alteraciones del comportamiento.

¿Cómo puede responder la escuela a la problemática de las dificultaes del lenguaje y de sus consecuencias sobre los aprendizajes y sobre la integración social?

Hay una primera respuesta evidente: conseguir que estas dificultades desaparezcan, sus consecuencias desaparecerán después.

Es posible en algunos casos, como los trastornos evolutivos leves del habla o del lenguaje expresivo. No lo es en un gran número de casos,por la naturaleza o por la gravedad de los cuadros patológicos que presentan estos niños.

Hay que partir de otra evidencia: la sociedad en su conjunto no tiende a reducir las diferencias individuales entre las personas sino a incrementarlas, reforzando aquellos que por naturaleza gozan de buenas aptitudes naturales y proporcionando menos estímulos a los qu presentan escasas disposiciones, sea para el canto, para el dibujo, para el baile o, por supuesto, para el lenguaje.

Es algo que los programas terapéuticos intentan corregir dentro del entorno familiar: es algo que debemos ser capaces de modificar también dentro del entorno escolar.

¿Qué deberían pedir a la escuela las familas de los niños con trastornos de lenguaje y los profesionales  que intentan ayudarles?:

- en primer lugar, una escuela "no dañina" que no añada dificultades a las que presentan los niños.


- esto supone un cambio en las actitudes para favorecer la interacción en el aula de los alumnos con menos capacidad, para fomentar el respecto de los demás y para introducir en nuestra forma de comunicar algunos elementos que faciliten la comprensión y la imitación por parte de aquellos que aparecen como menos dotados.

- la inmensa mayoría de los aprendizajes escolares se realizan mediante el uso del lenguaje oral y escrito: habrá que prever una mayor flexibilidad de los programas para tener en cuenta las limitaciones de los niños con trastornos de lenguaje: a menudo se trata sólo de adaptacioanes de acceso pero a veces habrá que realizar adaptaciones más profundas y más estructurales para conseguir acercar los conceptos a pesar de las deficiencias del código que los representa

- un proyecto común entre todos los miembros de la comunidad educativa: los especialistas, el profesorado en general y la familia

- el papel del especialista en AL no puede limitarse a la aplicación aislada de programas y técnicas específicas: esto sólo vale para aquellos que presentan dificultades ligeras y pasajeras; su responsabilidad es precisamente la de poner en marcha y de sostener con su capacidad y sus conocimientos un proyecto de esta naturaleza.

Este planteamiento va ligado a decisiones concretas acerca del control de contingencias (grupos de apoyo de número reducido, presencia de especialistas en AL en la escuela pero también en el aula) y de aplicación de estrategias compensatorias o adaptativas (ajuste de plazos de aprendizaje, modificaciones metodológicas en determinados casos, introducción de sistemas aumentativos...)"

miércoles, 7 de diciembre de 2011

EL MUTISMO SELECTIVO

El mutismo selectivo es un trastorno poco frecuente, hay muy pocos especialistas y pocas asociaciones a las que acudir. Es un tema que me interesa especialmente porque una persona de mi entorno más cercano ha recibido este diagnóstico. Yo he trabajado en mi colegio con dos niños: una niña que no habló con los profesores hasta segundo de educación primaria y un niño que habló después de cambiar de escuela.

¿QUÉ ES EL MUTISMO SELECTIVO?:

Se puede definir como la DIFICULTAD QUE PRESENTAN ALGUNOS NIÑOS PARA COMUNICARSE VERBALMENTE EN ENTORNOS Y SITUACIONES POCO FAMILIARES Y CON PERSONAS POCO CONOCIDAS.

Esto indica:
  • que los niños con mutismo selectivo PUEDEN expresarse con una competencia lingüística adecuada a su edad
  • que se comunican verbalmente en su entorno familiar
  • y que no lo ponen en práctica en otros ambientes y con otras personas.

Estas personas suelen tener rasgos de personalidad característicos como:
  • timidez
  • retraimiento social
  • dependencia
  • perfeccionismo
  • conductas de ansiedad y de evitación.

Según la bibliografía sobre el tema hay autores que lo explican más como un problema de comunicación o como un comportamiento derivado de una situación de ansiedad (versión más aceptada).


MODELO EXPLICATIVO DEL MUTISMO SELECTIVO

FACTORES PREDISPONENTES:
- Características de personalidad
- Problemas de lenguaje y habla (no se da en todos los casos)
- Exigencia excesiva y sobreprotección en el contexto familiar



FACTORES PRECIPITANTES:
- Inicio de la escolaridad
- Acontecimientos traumáticos o estresantes



FACTORES MANTENEDORES:
- Vivencia de disminución de la ansiedad al evitar situaciones en las que se tiene que hablar
- Acomodación del entorno a la conducta del niño
- Exceso de atención recibida
- Comentarios por parte del entorno de “aceptación del problema”
- Aceptación de respuestas no orales.



DIAGNÓSTICO:

Según el DSM IV-R (Manual Estadístico de la Asociación Americana de Psiquiatría, http://asociacionmutismoselectivo.blogspot.com/2010/10/mutismo-selectivo-dsm-iv-tr-y-cie-10.html) se tienen que cumplir TODOS estos criterios i hacer un diagnóstico diferencial con otros trastornos o ver si hay alguna patología asociada:

1- “Incapacidad persistente para hablar en situaciones específicas (en la escuela i en general en situaciones en las que estén presentes personas desconocidas) a pesar de hacerlo en otras situaciones (con los padres i con personas muy familiares”

2- “La alteración interfiere en el rendimiento escolar o en la comunicación social”

3- “La duración de la alteración es de por lo menos un mes”

4- “La incapacidad para hablar no se debe a una falta de conocimiento o de fluidez del lenguaje hablado requerido en la situación social”

5- “El trastorno no se explica mejor por la presencia de un trastorno de la comunicación i no aparece exclusivamente en el transcurso de un TGD, esquizofrenia o un trastorno psiquiátrico”.

CUESTIONARIO PARA LA DETECCIÓN:

El cuestionario nos indica una serie de indicadores. Los seis primeros expresan la sintomatología básica, los otros son factores de personalidad o comportamientos que suelen estar presentes en estos alumnos.

Indicador
No
1
En el entorno escolar no habla nunca pudiendo hacerlo



2
En el entorno escolar habla sólo en algunas situaciones



3
No habla nunca con adultos en la escuela



4
Habla solamente con algunos alumnos de la escuela



5
No habla nunca con los niños de la escuela



6
Habla solo con algunos compañeros de la escuela



7
Manifiesta ansiedad en situaciones de interacción verbal y contacto corporal (se mete los dedos en la boca, se remueve en el asiento, se muestra tenso...)



8
Rigidez en la postura corporal habitual (espalda y cuello muy rectos, brazos caídos paralelos al cuerpo, boca abierta o apretada...)



9
Inexpresividad facial y corporal (no realiza gestos faciales, no sonríe, no gesticula con las manos ni con el cuerpo)



10
Conductas de evitación de la interacción social (mira para otro lado, baja la cabeza, evita el contacto físico...)



11
Conductas de evitación de situaciones sociales (no va al baño con los demás en grupo, no va a los rincones de trabajo del aula, en los recreos juega solo o con un niño..)



12
Se demora en la realización de tareas o actividades escolares más de lo debido



13
Habitualmente no toma la iniciativa para asumir pequeñas responsabilidades



14
Habitualmente no participa en la dinámica del aula






TRATAMIENTO:

EN LA FAMILIA:

  • Ofrecer al niño un ambiente de seguridad, comunicación, comprensión y afecto.
  • Eliminar conductas de sobreprotección.
  • Manifestar confianza en el niño.
  • Evitar exigir demasiado al niño.
  • Desarrollar hábitos de autonomía adecuados a su edad.
  • No evitar situaciones sociales.
  • Buscar actividades en las que tenga que participar en otros entornos y con otras personas fuera del ámbito familiar.

EN LA ESCUELA:

  • Evitar la sobreprotección, no haciendo las tareas que el niño pueda hacer.
  • No exigirle que hable.
  • Asignar al niño pequeñas tareas de responsabilidad dentro del aula adecuadas a su edad.
  • Organizar actividades que impliquen contacto físico (cosquillas, darse abrazos...)
  • Organizar actividades de relajación (para toda la clase)
  • Coordinarse con la família
  • Realizar juegos con el alumno en el que pueda participar (mímica, juegos de movimiento, de turnos...)
  • Realizar juegos de movimiento corporal (imitar gestos, adivinar objetos mediante mímica...).


FUENTES:

  • Manual DSM-IV-R
  • CIE 10
  • Creena Navarra